Absurda es la idea de pensar que las empresas familiares quiebran luego de pasar las generaciones, la idea de negocio aprendida de su abuelo ha llevado a Santiago Molano a seguir las practicas comerciales para mantener la empresa Ramo en los altos índices de confiabilidad y gusto de los consumidores. Los ponquesitos de olor agradable amarrados con una cinta que eran vendidos a compañeros de trabajo, hoy es el emporio industrial alimenticio con reconocimiento a nivel nacional.
Santiago ocupa un cargo directivo en la empresa alimenticia, sin embargo es uno de los pocos administrativos con estirpe y linaje del mismo fundador. Logró ascender de manera escalonada como cualquier empleado entusiasta, es uno de los secretos de estabilidad económica empresarial, la empresa se proyecta a aumentar sus ventas en un 20% este año y para esto cuenta con nuevos productos que hacen fila en los inventarios de innovación y sabor. En la imagen algunos productos que entrarán próximamente al mercado.
Ramo, sigue siendo una empresa familiar, aunque cuente con una junta directiva y un velo corporativo, la propiedad sigue, los socios dan lineamientos pero no en el día a día, sino sobre las metas y la conservación de los valores empresariales sobre las cuales fue fundado la empresa de orgullo nacional. Aunque el abuelo era alcahuete en ocasiones por tomar las responsabilidades de todo el mundo, tomando incluso el riesgo de los demás, con su muerte la empresa no ha vigorizado el trato con sus empleados lo que se ha considerado como un legado de amistad y compromiso propio.
Hace dos años la empresa reporto perdidas por administraciones incorrectas pero en la reorganización se ha logrado superar estos indicadores haciendo que la empresa vuelva a dar índices de rentabilidad, la tarea más fuerte es lograr la internacionalización, sin dejar de lado las fuentes nacionales que gratamente compran sus productos.
La nueva planta de alimentos instalada en Mosquera Cundinamarca busca solucionar los problemas de abastecimiento que venia presentando la empresa, y constituye una herramienta súper importante con la cual se busca llegar a nuevos mercados en el exterior que según la proyección, dentro de tres años el impacto internacional será de una mayor magnitud. (Lee también: Raúl Cuero: capacidad inventiva del hombre)