El mayor banco de Noruega exigió la prohibición del dinero en efectivo, este es el primer paso para iniciar la guerra de clases, lo que muy posiblemente traería consecuencias definitivas para la sociedad. Aunque los rumores de reuniones secretas de grandes lideres mundiales abordando la temática se ha expandido en muchos lugares solo hasta ahora una entidad bancaria se atrevió a romper un paradigma del dinero impreso en papel y estampillas de seguridad.
Estas campañas de abolición han tomado fuerzas en países y como china, Dinamarca y Suecia que buscan superar la crisis económica acabando de una vez por todas con el dinero en efectivo. El bajo precio del petróleo hace que medidas desesperadas se lleven a cabo. Según el Fondo Monetario Internacional la creación de dinero en efectivo es un lujo que hay que retirar del mercado.
La guerra contra el efectivo fija limites para los compradores, por lo tanto las autoridades tienen el derecho a restringir topes máximos a retirar en los bancos, así como también limita lo que se puede comprar en efectivo. Al parecer estas medidas son tomadas por los bancos y las entidades financieras como una prevención de rescate a empresas que atraviesen dificultades financieras, producidos por accionistas y depositantes de dinero en cuentas bancarias. Las tazas de interés serían vigorizadas y permitirá evitar que las altas sumas de dinero en efectivo sean un dolor de cabeza a la hora de justificar deudas. Es decir lo que realmente pretenden es impedir que la gente saque su dinero del banco y lo pueda guardar en su casa.
Teniendo en cuenta que el dinero es virtual, estos valores pueden ser usados sin consentimiento del dueño para salvar empresas golpeadas por la quiebra, con estos nuevos parámetros se podría obligar a los dueños de las cuentas bancarias a gastarlo por motivos macroeconómicos, o retener el gasto de consumo a conveniencia de los bancos cuando sea necesario.
Los beneficios para la banca son evidentes, no solo someterían tasas o impuestos a cada transacción sino que también podrían cargar costos a cada movimiento financiero. Las corridas simultaneas o pánicos bancarios podrían ser evitados.
En los sistemas bancarios como el colombiano, los bancos están obligados a mantener una fracción en efectivo, en el momento que se apruebe este sistema financiero, los clientes de los bancos se verán obligados a retener sus valores en las franquicias, llegado el caso de la quiebra, los bancos tranquilamente cerrarían sus puertas pues no hay dinero para volver a sus clientes, lo que aumentaría los inconformismos y posibles hecatombes.
El hecho de guardar dinero bajo la almohada para una emergencia ya no será una opción de ahorro, el banco será propietario de su dinero y de su vida, es decir que esta medida no tiene nada que ver con la modernidad y mucho menos con la comodidad.
La sugerencia de los bancos es una manera de combatir los negocios delictivos como el narcotráfico y el lavado de activos que son muy permisivos haciendo uso de efectivo en el mercado negro. En estos momentos alrededor del mundo hay tanto dinero en efectivo que puede convertirse en un verdadero peligro. Según los bancos esta medida debe ser acogida por todos puesto que solo un 6% de los ciudadanos en Noruega hace uso de dinero en efectivo, el resto se ha culturizado en esta estrategia bancaria.
La eliminación del dinero en efectivo no se daría de un día para otro sino que paulatinamente se irían incluyendo en las estrategias de mercado para la transparencia y la medición de gastos promedios dependiendo la condición de cada ciudadano. Libertad y Pensamiento considera que los sistemas capitalistas tienen un punto de quiebre debido a la población creciente y desigual. (Lee también: ¿Quienes son los héroes en los billetes de Colombia?)