-->

Siguen muriendo las abejas, culpable: El hombre

author photo 9:37

Según los estudios presentados por la Universidad de Exeter en el Reino Unido en compañía de la Universidad de Berkeley en Estados Unidos revelaron que la abeja europea conocida en la ciencia como Apis Mellifera, es la principal responsable de el virus mutante que hace que las abejas nazcan con alas deformes en millones de colmenas del mundo. La acción del ser humano que usa estos insectos para polinizar cultivos ha hecho que se altere el orden natural provocando un desastre en el ecosistema apícola.

La propagación de dicha mutación se ha vuelto mucho mas peligrosa debido a la aparición de un nuevo agente en el entorno, el acaro Varroa se alimenta de las larvas de la abeja haciendo de este virus una potencia mas peligrosa. Los autores de varios estudios han secuenciado la composición molecular del virus, y han promovido nuevas estrategias para evitar el trafico de las abejas en varios sectores donde se podría propagar de manera mas rápida este virus y así mismo la vigorización de medidas para mitigar el impacto de los ácaros ya que podrían afectar a otros polinizadores animales silvestres.

Esta pandemia no es natural sino provocada por el hombre por la misma razón que evitarla y acabarla también depende de nosotros. No es común crear un problema y quedarnos con los brazos cruzados mientras un ecosistema se destruye como un barco de papel en el agua.

Monsanto, también tiene su parte, el glifosato que por tantos años ha expendido a los agricultores también ha provocado mutaciones irreversibles a las abejas, así como el vuelo de las abejas se retrasa a la colmena debido a la aspersión de dicho herbicida, los índices de recolección se reducen, haciendo que las abejas no completen ciclos necesarios para su reproducción.

Otras especies propias del suelo como las lombrices y las mariposas monarcas también se encuentran amenazadas, la ingesta de glifosato hacen que se intoxiquen haciendo que pierdan la ubicación espacial y en lo mas común mueran, generando terrenos infértiles. Esto es solamente un comienzo, el uso de un fungicida tradicional, sin tener en cuenta que otras sustancias químicas como los neonicotinoides, son también culpables de la mortandad de esta clase de abejas.

Libertad y Pensamiento recuerda que, en algún momento Albert Einstein se atrevió a mencionar que si llegasen a desaparecer las abejas, al ser humano solo le quedarían 7 años sobre la tierra, poco se ha equivocado en su planteamientos así que no permitamos la extinción de esta especie vital. (Lee también: por fin, Monsanto será juzgado por crímenes de lesa humanidad)